Cómo Importar de China de manera segura

¿Importando desde China o pensando en hacerlo? Ya sea que lo hagas por transporte marítimo o aéreo, debes tener en cuenta algunos aspectos importantes y algunos conocimientos.

Este tipo de negocio puede ser muy rentable si aprendes el proceso para importar de China de manera profesional y de esta forma evitar cualquier inconveniente que se te presente en el camino.

7 Pasos para Importar desde China de forma segura

He hecho una lista completa de todos los requisitos que necesitarás para sacarle provecho a este negocio y volverte un experto en las importaciones desde China.

1. Investiga las reglas y regulaciones específicas

Cuando importas un producto en particular, deberás investigar las regulaciones que deberás cumplir.

El número de reglas dependerá del tipo de producto que estés importando. Este es siempre un requisito para cualquier importación, pero en el caso de China, tendrás que ser especialmente claro al respecto. Eso se debe a que una gran cantidad de proveedores chinos no fabrican productos que cumplan con tales regulaciones.

En algunas industrias, solo alrededor del 5%  de los proveedores de exportación chinos cumplen con los estándares y regulaciones habituales de la Unión Europea (UE).

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Entre aquellos productos especialmente sensibles y sujetos a una mayor regulación y que también se encuentran entre las principales importaciones de Asia se encuentran:

• Juguetes y otros productos para niños.
• Alimentos y recipientes para alimentos.
• Vehículos, motores y sus componentes.
• Productos y componentes eléctricos y electrónicos.
• Textiles y calzado.
• Muebles.
• Productos químicos.
• Productos cosméticos y de higiene.
• Materiales de construcción; y todo tipo de embalajes en general.

Las regulaciones generalmente se aplican a diferentes regiones económicas, como la Unión Europea, Estados Unidos, Australia, Canadá, etc.

Pero a veces también existen reglas específicas en cada país para la importación de ciertos productos.

Por ello, te recomiendo que investigues y determines con exactitud qué normativas deberá cumplir tu producto para poder ingresar a tu país y no generar problemas en la aduana.

Puedes encontrar esta información a través de las cámaras de comercio y aduanas de tu país.

2. Elige proveedores chinos de buena reputación

Este punto es crucial por varias razones. En primer lugar, debes saber que el importador es entera y exclusivamente responsable de los productos que importa.

Cualquier irregularidad en el cumplimiento de las normas y certificaciones puede generar serios problemas legales para el importador si resulta en una demanda porque el producto causa un daño a un consumidor.

En segundo lugar, si tu proveedor no tiene buena reputación y emite una certificación falsa o incorrecta, tus productos pueden ser retenidos en la aduana. Ten en cuenta que esto sucede con bastante frecuencia en China.

Como mínimo, te traerá dolores de cabeza y costos extra logísticos (en términos de almacenamiento y demoras), y las autoridades portuarias podrían terminar reteniendo la mercancía y prohibiendo absolutamente su entrada al país.

En este sentido, es importante no confiar en cualquier proveedor que te diga que cumple con la normativa; es recomendable ir a conocer personalmente la fábrica y el producto.

También ayuda ir acompañado de un especialista que entienda los problemas técnicos que pueden surgir en relación con el producto y qué especificaciones se aplican para cumplir con la normativa.

3. Firma un contrato de compra y venta

Una vez que hayas investigado a fondo todas las certificaciones que necesita tu producto y hayas encontrado un proveedor de confianza que las cumpla, es igualmente importante redactar un contrato de compra y venta en el que se detalle absolutamente todo.

Eso es especialmente cierto para las especificaciones del producto y las condiciones de devolución y compensación si el producto recibido no cumple con el acuerdo.

Esto te ahorrará muchos problemas a largo plazo, y es el punto en el que la mayoría de los importadores se quedan cortos; cuando se importa desde China, no se puede prestar suficiente atención a los detalles.

En cuanto a la especificación del producto, debes elaborar un documento que detalle cada característica.

Debes hacerlo de una manera que no deje lugar a interpretaciones subjetivas y que pueda aceptarse internacionalmente y en diferentes contextos culturales. Entonces, si estás hablando de colores, especifica el color exacto; si estás hablando de materiales, especifica las densidades, la composición y la textura.

Ningún aspecto o característica de tu producto debe quedar sin especificar. Si descuidas esto, el proveedor elegirá cómo cumplir con las características del producto y, obviamente, lo hará de la manera que le resulte más rentable.

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Esto corre el riesgo de disminuir la calidad y, por lo tanto, el producto final.

Por eso, el mejor consejo es especificar todo cuando se importa desde China; variaciones de peso aceptables, dimensiones, embalaje, color, impresión, materiales, texturas, tratamientos químicos, etiquetado, logotipos y otras personalizaciones, las características de los componentes, y cualquier otra cosa que se te ocurra especificar.

Cuanto más específico seas, menos sorpresas recibirás, y si sucede algo inesperado, habrá una mayor probabilidad de que no tengas que pagar por ello.

También es muy importante especificar los detalles de la preparación de tus mercancías cuando estén listas para ser enviadas; paletización, tipo de pallets, embalaje, cantidad y calidad de las cajas, etc.

4. Verifica las condiciones de transporte e Incoterms

Los Incoterms son términos comerciales internacionales que rigen las responsabilidades relacionadas con el transporte internacional establecidas entre comprador y proveedor.

Existen numerosos Incoterms, y comprar bajo uno u otro puede cambiar sustancialmente el monto total de la compra. Debido a esto, se recomienda encarecidamente que resuelvas esto antes de colocar tu firma en el contrato de compra y venta.

Si no estás seguro de qué Incoterm elegir, asesórate con un especialista en carga internacional y aduanas.

Normalmente al importar desde China, los proveedores quieren realizar envíos bajo Incoterm EXW (Ex Works), porque es lo más ventajoso para ellos. Otorga la máxima obligación al comprador y la mínima al vendedor, quien no es responsable más que de tener la mercadería lista en tu fabrica o almacén.

A menudo se usa porque el proveedor no tiene una licencia de exportación. En estos casos, es necesario encontrar una empresa intermediaria a través de la cual gestionar la exportación, lo que complica y añade riesgo al proceso.

Por ello, recomiendo tratar de trabajar bajo Incoterm FOB (Free On Board), bajo el cual el comprador es responsable de designar y reservar el flete, pero es el proveedor quien debe tener la mercancía preparada y cargada en el barco en el puerto de origen.

Recomiendo esta medida no solo por las instalaciones involucradas en relación a EXW (Ex Works), sino también porque los proveedores chinos que aceptan o sugieren trabajar bajo el Incoterm FOB suelen ser de mucha más calidad que los que trabajan bajo EXW.

El Incoterm FOB se puede tomar como prueba de que el proveedor chino que trabaja con él sabe lo que está haciendo, tiene experiencia y es de confianza.

5. Elige el medio de transporte internacional

Una vez resuelto todo lo relacionado con tu producto, proveedor y acuerdo de venta, y fijadas las fechas de producción y entrega, debes planificar tu transporte internacional.

Lo primero que tendrás que decidir será si utilizarás transporte aéreo o marítimo.

Es decir, si aún no lo has establecido a través del acuerdo con el Incoterm. Si ya está establecido, como en el caso del FOB, que solo es aplicable al transporte marítimo, aún es necesario tener en cuenta las ventajas y desventajas de utilizar el transporte aéreo o marítimo, como los rangos de precios y los plazos relacionados con ambas opciones.

¿Por qué? Si, por ejemplo, has elegido el transporte marítimo, pero la producción se retrasa gravemente, es posible que en el último momento debas considerar un cambio a FCA (Free Carrier) y enviar por vía aérea.

Si has accedido a EXW y aún tienes que decidir el medio de transporte, entonces lo que debes tener en cuenta principalmente es la rapidez con la que tus productos deben llegar al mercado y el volumen y peso de tu carga.

Por lo general, el transporte aéreo solo es viable cuando se trata de un volumen bajo de bienes con un alto valor agregado y un alto margen de beneficio.

6. Ten en cuenta los tiempos tanto en carga como en aduanas

Cuando estás importando desde China, el tiempo es un factor decisivo a tener en cuenta para una campaña exitosa. Siempre recomiendo planificar un transporte desde o hacia China con un mínimo de tres meses de antelación.

Por lo general, el tiempo de tránsito aproximado desde China para casi todas las cargas es de entre 28 y 35 días.

Esto puede variar según el puerto de origen y la conexión con el punto de recojo de la mercancía. Pero también hay que tener en cuenta el proceso de trámites en logística y aduanas.

Si quieres tener la opción de elegir la naviera que más se adecue a tus necesidades en cuanto a tiempo y tarifas, deberás coordinar la gestión y reservar con tu agente de carga internacional un mínimo de unas semanas antes de la salida del barco.

De esta forma, también te aseguras de que el agente en el puerto de origen y el proveedor tengan tiempo para preparar la carga en el contenedor y su entrega en el puerto antes de la salida prevista.

Por último, debes tener en cuenta los plazos aduaneros en los que se enviará tu mercancía al salir de China y entrar a tu país. Ten en cuenta que si alguno de los documentos presentados no está correcto o completo, o si por alguna razón tu mercancía debe pasar una inspección, esto podría retrasar considerablemente la llegada.

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7. Ten en cuenta el GRI

Si quieres reducir al máximo los costes de tus envíos marítimos internacionales, esto podría ser clave.

Esto es especialmente cierto cuando se importa desde China. El GRI representa los incrementos en las tarifas de fletes que aplican los agentes de carga al inicio de cada mes, y que luego se reducen semanalmente hasta volver a subir al inicio del mes siguiente.

Si no has mirado y planificado tu transporte internacional con tiempo suficiente, y de repente te confirman un GRI, es probable que no encuentres sitio en el barco que sale en la fecha que quieres, o que tengas para pagar una tarifa del flete que ya incluyeron el GRI, y que podrían terminar siendo el doble de lo que hubieras pagado si lo hubieras planeado antes.

Por ello, ante la duda que cada mes rodea a un nuevo GRI, te recomiendo hablar con algún consultor lo antes posible, para obtener tarifas con el GRI más bajo posible, o para garantizar precios a medio plazo, lo que significa que si reservas a una determinada tarifa, esta permanecerá estable durante los próximos tres meses, incluso si se aplica un nuevo GRI.